Un cambio.

Mi nuevo blog representa un cambio, que necesito, y estoy dispuesta a hacer. Junto con mi nuevo blog llegan promesas. Prometo comer bien, lo estoy haciendo, dejé de comer boludeces, necesito hacerle un bien a mi cuerpo. Prometo salir adelante. Me cuesta, todo cuesta, el que dijo que la vida era fácil, mintió. Prometo interesarme en las cosas. Me voy a poner las pilas en el colegio, con mis amigas, todo. Prometo dejar de ser Celeste la que no parece tener un buen día. Si tengo un mal día lo sabrán, pero siempre hay momentos buenos y hay que saber destacarlos. Yo sé que prometo mucho y poco hago, pero espero cumplir esta vez. Prometo olvidarme del pasado... Estaba enamorada, pero ya no lo quiero cerca. En el fondo de mi corazón lo amo, pero no quiero volver a ser la enferma, la amiga obsesiva, o pesada total. Aunque me duela, y llore mil ríos al recordarlo, prefiero olvidarlo. Tengo que admitir que durante el tiempo que duró, me hizo felíz. Pero tengo que aprender a vivir sin él, no necesitarlo, recordarlo sin rencor, a poder pensar en su sonrisa sin que me den ganas de llorar. No sé si estoy del todo curada de mis adicciones (y él era la principal) no sé qué me espera en el futuro, pero estoy segura de algo, adiós, PARA SIEMPRE.
Y con eso concluye mi etapa pasada, y comienza la nueva, ahora, a bañarme y a dormir, que mañana, todo vuelve a comenzar. Borrón, cuenta nueva, y a la mierda!